No podremos hablar de ética profesional sin antes definir profesión: "empleo facultativo u oficio que alguien ejerce y por el que percibe una retribución" [93]. Una profesión es una actividad personal en beneficio propio y en beneficio de los demás realizándola con la mayor dignidad humana. La finalidad de ejercer una profesión es el bien común, para un beneficio de nuestra sociedad. Sin esta meta la profesión se transforma en una actividad cuyo único fin es ganar dinero llevando al sujeto a una desmotivación moral y ética. El profesional debe de tener aparte de una capacidad facultativa e intelectual, una capacidad moral, obteniendo así dignidad y nobleza en su trabajo.
La ética profesional estudia las reglas morales que guían el comportamiento en la actividad profesional e intentan mantener una buena conducta. Todo profesional debería tener un código de ética sobre su mesa de trabajo y debería tenerlo presente durante su recorrido laboral, pudiendo así recurrir a él en cualquier momento de duda. Lo ideal sería que cada profesión tuviera un código ético profesional estándar, pero desgraciadamente no es así. A día de hoy ese código estándar no existe para los profesionales que nos dedicamos a la informática. Existen asociaciones, como ACM, ACS, ATI, etc, que tiene definidos sus propios códigos éticos para sus profesionales, pero no podemos decir que todos los profesionales que nos dedicamos a este campo seguimos el mismo código ético. Sin embargo si podemos decir que se cumple para el caso de la medicina. Todos los médicos tienen unas mismas reglas éticas y morales que seguir.