La definición más restrictiva de la EI es considerarla como la disciplina que analiza problemas éticos que son creados por la tecnología de los ordenadores ó también los que son creados por las personas que utilizan los avances de las tecnologías de la información. Esta definición es planteada por Guilbert, profesor de ética informática en la Universidad de Deusto (Bilbao), en su artículo, "¿Qué es la ética informática?" [41].
La EI se define pues como un conjunto de normas que guían al informático y a las personas que se relacionan con el mundo de las nuevas tecnologías.
Deborah Jhonson, considerada como una de las máximas autoridades en el campo de la ética informática, anunciaba en su libro Computer Ethics, que el estudio de la EI resulta ser el estudio de los seres humanos y la sociedad, así como nuestras metas y nuestros valores, nuestras normas de comportamiento, las maneras en las que nos organizamos y conferimos derechos y responsabilidades [13].
Moor, en su artículo, What is computer ethics? [43], define la EI como el análisis de la naturaleza y el impacto social de la tecnología informática y la correspondiente formulación y justificación de políticas para un uso ético de dicha tecnología.
Dado el avance de las nuevas tecnologías, los informáticos nos encontramos con nuevos problemas en los que no existe solución legal y nos vemos obligados a tomar nuestras propias decisiones. Es por ello por lo que aparece la EI, como un nuevo medio de reglamentación reemplazando así la falta de normas legales ó la reconstrucción de aquellas que existan pero estén obsoletas.
Los objetivos de la EI son simplemente dos: apreciar los problemas éticos encontrados ante un nuevo fenómeno e intentar darle una solución encaminada a un bienestar social.
Conger [6], argumenta que la intención de crear una EI es incorporar en la humanidad una conciencia social, relacionada con el uso de la tecnología informática, además de ayudar a los informáticos a utilizar los ordenadores no sólo con fines lucrativos sino también con criterios éticos.
Según Pecorino [20], el objetivo es tomar decisiones sobre temas tecnológicos de manera consistente con la afirmación de los propios valores que uno profesa o con los derechos humanos en general.
La EI se plantea entonces varios objetivos intermedios, según Parker [19], descubrir y articular dilemas éticos, determinar en que medida son agravados, transformados o creados por el uso de la tecnología informática. Por otro lado, James Moor [43] plantea los siguientes objetivos: analizar y proponer un marco conceptual adecuado, formular principios de actuación para determinar qué hacer con las nuevas actividades informáticas en las que no se perciben con claridad líneas de actuación. La idea de marco conceptual, nos la explica en un claro ejemplo: Si quisiéramos formular una política para proteger programas, estaríamos buscando una política para proteger a una clase de propiedad intelectual, pero, ¿Qué es un programa?, ¿Es propiedad realmente intelectual, que se puede poseer, o es como una idea, un algoritmo, que no se posee? Esta claro que necesitamos una idea conceptual de programa para contestar estas preguntas y además ello es muy importante para poder finalmente hace una buena política sobre la protección de programas [43].
A continuación vamos a intentar cumplir uno de los principales objetivos de la EI, debemos ser capaces de demostrar al mundo que existen dilemas éticos en nuestras tareas diarias, que se van acumulando a la misma vez que las tecnologías avanzan, así podremos contestar a la pregunta, ¿qué tiene que ver la ética con la informática?