Años 384-323 a.C.
Aristóteles estudió la forma de llegar a la verdadera felicidad o eudaimonia (vivir bien). Es necesario que el hombre cumpla la función que le corresponde: excelencia o virtud, que definía como la capacidad de pensar o lo que es lo mismo el ejercicio de razonar. El fin último de la vida es ser autosuficiente. El bien supremo del hombre deberá consistir en algún tipo de actividad donde pueda cumplir adecuadamente su función. Todos tenemos una misión que cumplir en la comunidad y nuestro deber moral es desempeñar nuestro papel en la misma. La felicidad verdadera reside en el ejercicio de la inteligencia teórica, en la contemplación y comprensión de conocimiento. La felicidad también se puede alcanzar por el ejercicio del entendimiento práctico que consiste en dominar las pasiones y conseguir una buena relación con el mundo natural y social que nos rodea.
La felicidad se obtiene a través de la virtud cuya principal componente es la prudencia: facilita la toma de decisiones y es la guía de las demás virtudes.
El estudio de la ética y la política lo llevó a descubrir la importancia del logos (la palabra) y la comunicación y de ahí se deriva otro de sus grandes estudios: la lógica. Esta lógica se basaba en tres conceptos: Las categorías o formas más generales de la realidad, el silogismo o procedimiento para demostrar la necesidad de conclusión y la inducción o demostración que parte de proposiciones particulares.
En el año 334 a.C. fundó el Liceo y unas de sus obras más importantes fue "Ética a Nicómaco" , dedicada a su hijo, donde definió la felicidad como una actividad que concuerda con la naturaleza de la humanidad. Esta obra consta de diez libros y sus contenidos forman parte de la visión que tenia Aristóteles de la virtud y la felicidad. A continuación veremos un resumen de los temas más importantes tratados en cada uno de los libros: